Es una película difícil de definir, se percibe como una sátira musical de las “parejas famosas” de los medios y los espectadores “coristas” que están a su alrededor.

La historia narra, como Henry McHenry (Adam Driver) un comediante irreverente con un show de “stand up” exitoso y Ann Defrasnoux (Marion Cotillard), la cantante de ópera que agota las entradas de todas sus presentaciones se vuelven la pareja del momento y al poco tiempo esperan la llegada de su primer bebé, una niña que llaman Annette, la cual dirige a sus padres a un destino tormentoso.

El trabajo director Leos Carax es sobresaliente, aprovecha todo los elementos desde las actuaciones, escenografías, efectos especiales para llenar el filme de momentos llamativos pero son escasos. Muy difícil de disfrutar si no estás acostumbrado al cine de arte. La música compuesta por el grupo Sparks es muy vivaz y dinámica, sobretodo la primera canción, pero hay un momento, en el que ya se vuelven repetitivas y llegan a cansar.

Dato banal: La primera opción para el papel de Ann Defrasnoux fue Rooney Mara pero lo rechazó, después le dieron la oportunidad a Michelle Williams pero lo dejó cuando el proyecto se estancó, al final se lo quedó Marion Cotillard.

Veredicto: Tres tocinos cocinados por una cantante de ópera. No es para todo el público, podría entrar en muchas categorías de los óscares pero solo de relleno.

tres tocinos
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Hugo Arzate

Graduado de la carrera de Diseñador grafico, amante del cine desde que tiene memoria, dibujante abstracto. Un pasatiempo es buscar información de películas, ilustraciones y posters cinematograficos.